El lado oscuro del bienestar

Las plataformas digitales y redes sociales se han convertido en una fuente inagotable de información, incluyendo temas de salud mental. Si bien esto puede ser positivo para democratizar el conocimiento, también existe el riesgo de la desinformación y el mal uso de conceptos y herramientas. Términos como “mindfulness", "sanar al niño interior", "apego ansioso/evitativo", "coaching" o "biohacking" son cada vez más populares en el mundo online, pero a menudo se presentan de manera distorsionada, simplificada o incluso peligrosa. Aprendamos juntos cómo identificar este mal uso y algunas recomendaciones sobre cómo abordar estos temas de un modo seguro y realmente beneficioso:

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Mindfulness: Atención Plena sin Distorsiones

A menudo en redes sociales se simplifica el mindfulness como una técnica de relajación superficial, ignorando su profundidad y complejidad. Se promueve como una solución mágica para la ansiedad y el estrés, sin mencionar la importancia de la práctica constante y la guía adecuada. Se puede caer en la idea de que el mindfulness es una "cura rápida" para todos los males, sin comprender que requiere un compromiso a largo plazo y un aprendizaje continuo. Su mal uso puede tener consecuencias negativas para la salud mental. Por ejemplo, un aumento de la ansiedad debido a una práctica inapropiada puede generar un círculo vicioso que intensifique las preocupaciones y los pensamientos negativos.

El mindfulness es una práctica de atención plena que implica observar los pensamientos, emociones y sensaciones corporales sin juzgarlos. Requiere un entrenamiento constante y puede ser una herramienta útil para gestionar el estrés, la ansiedad y mejorar el bienestar emocional. Jon Kabat-Zinn, uno de los pioneros en la investigación y aplicación del mindfulness, lo define como "prestar atención de manera particular: a propósito, en el momento presente y sin juzgar".

Es fundamental comprender que el mindfulness no se trata de evitar las emociones, sino de observarlas con aceptación y sin juicio, lo que permite una mejor gestión emocional a largo plazo. Puede ser recomendable practicar mindfulness de forma regular para aumentar la conciencia del momento presente, reducir la reactividad emocional y cultivar la aceptación. Por ejemplo, dedicar 10 minutos al día a la práctica formal de la meditación, o integrar la atención plena en actividades cotidianas como caminar, comer o escuchar música.

Busca información sobre mindfulness en fuentes confiables, como asociaciones de profesionales de la salud mental o centros de meditación con experiencia. Considera la posibilidad de realizar un curso o taller con un instructor cualificado para aprender la técnica correctamente. Es importante recordar que el mindfulness no es una solución mágica, sino una herramienta que requiere práctica y paciencia para obtener sus beneficios.

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Sanar al Niño Interior: Un Proceso Profundo, No una Solución Mágica

Este proceso o estrategia terapéutica se presenta mucha veces en redes sociales como una solución rápida para superar casi cualquier problema emocional, sin reconocer las complejidades del trauma infantil y la necesidad de un proceso terapéutico adecuado. Se trivializa la experiencia de mirar y contactar al pasado o al niño interior y se ofrecen soluciones simplistas y generalizadoras que pueden ser ineficaces o incluso perjudiciales. Además se tiende a generar la falsa expectativa de que "sanar al niño interior" sería un proceso sencillo que se puede lograr con unos pocos consejos o ejercicios aplicables para todo el mundo y, lo que es peor, sin la necesidad de un acompañamiento con una persona profesional de la salud mental.

Sanar al niño interior es un proceso terapéutico que busca identificar, comprender y procesar las experiencias dolorosas de la infancia que pueden estar afectando al bienestar emocional en la edad adulta. Implica reconocer las necesidades no satisfechas infantiles, validar sus emociones y desarrollar estrategias para afrontar las consecuencias del trauma en la adultez.

Este proceso debería realizarse en el contexto de una terapia, para que acompañada de un profesional de la salud mental, la persona puede explorar las experiencias de su infancia, identificar patrones de comportamiento que se originaron en esa etapa, y trabajar en la construcción de una relación más compasiva y saludable consigo misma. A través de enfoques y técnicas psicoterapéuticas como la terapia Gestalt o el psicodrama, se puede acceder a estas etapas previas con el cuidado necesario a las emociones y necesidades infantiles, brindándole el apoyo y la validación que no recibió en el pasado dicho niño interior.

Si estás interesado en explorar tu infancia o experiencias de tu pasado que sientes tienen un efecto limitante en tu vida actual, busca la ayuda de un profesional de la salud mental cualificado. Desconfía de las soluciones rápidas y los consejos superficiales que se ofrecen en línea. Concretamente, un terapeuta con experiencia en trauma infantil puede guiarte en este proceso de manera segura y efectiva, ayudándote a comprender las raíces de tus dificultades emocionales y a desarrollar estrategias de afrontamiento saludables con el cuidado necesario que ese proceso requiere.

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Apego Ansioso/Evitativo: Más Allá de las Etiquetas

En casi todas las redes sociales, diferentes influenciadores utilizan las etiquetas de "apego ansioso" o "apego evitativo" de forma superficial para describir comportamientos en las relaciones, sin tener en cuenta la complejidad de la teoría del apego y la necesidad de una evaluación profesional personalizada. Se generalizan las características de cada estilo de apego y se crean estereotipos que finalmente resultan ser más perjudiciales que positivos. Incluso es común encontrarse con tests de apego poco fiables que llevan a las personas a autodiagnosticarse y/o etiquetar a sus parejas.

La teoría del apego describe cómo las experiencias tempranas con los cuidadores influyen en el desarrollo de los patrones de relación en la edad adulta. Según esta teoría, el apego ansioso se caracterizaría por una necesidad constante de aprobación y miedo al abandono, mientras que el apego evitativo se asocia a la dificultad para conectar emocionalmente y la tendencia a la independencia. Es importante destacar que existen diferentes estilos de apego y que estos pueden variar en un continuo, no se trata de categorías rígidas e inamovibles. Menos aún se trata de diagnósticos.

En un contexto de terapia de pareja se pueden utilizar estrategias derivadas de la teoría del apego para comprender las dinámicas de la relación, identificar patrones de comportamiento y desarrollar estrategias para mejorar la comunicación y la conexión emocional. Un terapeuta entrenado y supervisado puede ayudar a la pareja a reconocer sus estilos de apego, comprender cómo estos influyen en sus interacciones y desarrollar herramientas para construir una relación más segura y satisfactoria mediante una estrategia contextualizada a la historia de la pareja y adaptada a sus necesidades específicas.

Evita autodiagnosticarte o etiquetar a otros basándote en información superficial de redes sociales. Si tienes dificultades en tus relaciones, busca la ayuda de un profesional de la salud mental para una evaluación y un tratamiento adecuado. Un psicólogo o terapeuta de pareja puede realizar, si lo necesitas, una evaluación completa de tu estilo de apego y ofrecerte herramientas para mejorar tus relaciones interpersonales.

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Coaching: Más Allá de la Motivación Superficial

Con frecuencia, el coaching se presenta como una solución rápida para todos los problemas, prometiendo éxito instantáneo en cualquier área de la vida. Se simplifica como una serie de consejos motivacionales superficiales o se asocia a figuras que carecen de la formación y experiencia necesarias para ejercerlo de forma responsable. Se observa una tendencia a la autoproclamación de "coaches" sin certificaciones válidas ni supervisión adecuada, lo que puede resultar en consejos erróneos o incluso perjudiciales para las personas que los siguen.

El coaching es un proceso colaborativo entre un coach y un cliente que busca el desarrollo personal o profesional. Se basa en el establecimiento de objetivos, la identificación de obstáculos, el desarrollo de estrategias y la acción. Un coach profesional posee una formación específica en técnicas de comunicación, escucha activa, planificación y motivación, y se adhiere a un código ético que garantiza la seguridad y el bienestar del cliente.

La International Coaching Federation (ICF) define el coaching como "una relación de acompañamiento reflexivo y creativo con clientes que les inspira a maximizar su potencial personal y profesional". Un coach puede ayudar a una persona a definir sus metas profesionales, identificar sus fortalezas y debilidades, desarrollar un plan de acción para conseguir un ascenso o un cambio de trabajo, y superar las barreras que le impiden avanzar. Por ejemplo, un coach con experiencia en liderazgo puede guiar a un ejecutivo a mejorar sus habilidades de comunicación, gestionar equipos de manera efectiva y desarrollar una visión estratégica para su empresa.

Es fundamental verificar las credenciales y la experiencia del coach antes de seguir sus consejos en medios sociales. Desconfía de las promesas milagrosas y busca profesionales que ofrezcan un enfoque personalizado y basado en la evidencia. Asegúrate de que el coach tenga una formación acreditada por una institución reconocida, como la ICF, y que cuente con experiencia en el área específica en la que buscas ayuda.

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Navegando el Mundo Digital con Criterio

Las redes sociales pueden ser una herramienta poderosa para acceder a información sobre salud mental, pero es crucial utilizarlas con responsabilidad y criterio. La información disponible en línea puede ser confusa y, en ocasiones, contradictoria. Es fundamental desarrollar un pensamiento crítico y una actitud responsable para discernir entre la información confiable y la desinformación. Es importante recordar que:

• El mindfulness es una herramienta poderosa, pero requiere práctica y guía adecuada.

• Sanar al niño interior es un proceso terapéutico profundo que no se debe trivializar.

• La teoría del apego es compleja y no se debe utilizar para etiquetar a las personas de forma superficial.

• El coaching requiere un proceso estructurado y un coach cualificado.

En un mundo digital cada vez más complejo, es fundamental desarrollar un pensamiento crítico y una actitud responsable para navegar la información sobre salud mental y tomar decisiones informadas sobre nuestro bienestar.